Felipe Cancino
México
Detrás del maquillaje
escondía su tristeza
aún pintados sus labios
con el color de las cerezas
Vagaba durante el día
para a nadie molestar
huyendo de sus fantasmas
para no llegar a su hogar
En los parques y jardines
se acompañaba por palomas
se impregnaba de su cariño
respiraba de su aroma
Para la gente estaba loca
señalada desquiciada
nadie sabía su verdad
y lo que su alma atormentaba
Era una dama vagabunda
con la sonrisa disfrazada
pretendiendo tras un disfraz
el mundo no se enterará
Los niños la alimentaban
con su inocencia y carisma
había nacido para esto
para alimentar sonrisas
Payasa le gritaban
y ella amable sonreía
era alimento para su alma
y su esperanza renacía
Así hasta llegar la noche
y se enfrascada en oración
en un altar postraba
a quienes dijeron Adiós
la vida le arrebató
a sus amores cultivados
tal vez un hijo y un esposo
ambos ahora sepultados
Y nuevamente al nacer el día
salía para luchar
porque de payaso se vestía
y su tristeza disfrazar
escondía su tristeza
aún pintados sus labios
con el color de las cerezas
Vagaba durante el día
para a nadie molestar
huyendo de sus fantasmas
para no llegar a su hogar
En los parques y jardines
se acompañaba por palomas
se impregnaba de su cariño
respiraba de su aroma
Para la gente estaba loca
señalada desquiciada
nadie sabía su verdad
y lo que su alma atormentaba
Era una dama vagabunda
con la sonrisa disfrazada
pretendiendo tras un disfraz
el mundo no se enterará
Los niños la alimentaban
con su inocencia y carisma
había nacido para esto
para alimentar sonrisas
Payasa le gritaban
y ella amable sonreía
era alimento para su alma
y su esperanza renacía
Así hasta llegar la noche
y se enfrascada en oración
en un altar postraba
a quienes dijeron Adiós
la vida le arrebató
a sus amores cultivados
tal vez un hijo y un esposo
ambos ahora sepultados
Y nuevamente al nacer el día
salía para luchar
porque de payaso se vestía
y su tristeza disfrazar
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