domingo, 25 de mayo de 2014

EN SILENCIO









Quería olvidar de mis oídos
tus murmullos quietos
de tantas palabras falsas
que estremecían mis sueños.

Amabas mi boca,
deseabas mis pechos
los que erguidos soñaban
tus labios secos.

Sin decir nada acaricio mi pelo
enredando mis manos
como si fueran tus dedos.

Estoy temblando,
un calor extraño Invade el momento
donde con ansias no sé lo que quiero
quizás hacer el amor , o tener sexo
con la sombra de tu imagen
que ya casi no recuerdo.

Marcia Sevilla (Chile)
Derechos reservdos.

domingo, 18 de mayo de 2014

PAJAROS




Ay amor ¡
Mis ojos podrían parecerte desolados.
Doloridos…
OSCUROS
Llenos de llanto.
Pero si vieras en su interior,
Hay alegrías que vuelan como pájaros.
Pájaros de agua,
Pájaros de tinta enamorada
Pájaros tatuando los espejos de tu piel.
Pájaros que se anidan en tus senos,
Y cantan a la lluvia mimetizada del placer.
Hay pájaros de alegrías en mis ojos,
Ay amor ¡
Si pudieras verlos…
Guardando cómplices los nuestros secretos.
Secretos de mar y caracolas,
De brisas que entran y salen,
como el viento del norte
y nos dibujan los placeres con sus besos.
Ay amor ¡
Amor…
En mis ojos
Vuelan los pájaros de los recuerdos,
Picoteando los círculo de tus caderas,
Si pudieras verlos…
Vuelan y picotean el emblema
de tu pubis,
hermosamente decorado.
De tu pubis de cristal y tierra,
de tu pubis de frondas y selvas inescrutables,
y se vuelven anidar en tu pecho.
oh ¡ mujer
de espacios despintados por mis besos,
Equinoccio de la luna madre,
la divina paloma del solsticio del amor.
Hay pájaros en mis ojos
Que te adoran…
Si pudieras verlos,
Si pudieras verlos…
Roberto Rochin Suarez.
Canada



miércoles, 14 de mayo de 2014

LA NOCHE





























La noche, una botella de fernet con coca
Noche de neblinas y ojos enrojecidos
Noche de Neruda y Pizarnik
Letras que parecen cobrar vida
Palabras que semejan arañas escandalosas
Pensamientos olor a alcohol y tristezas
Lejos los cerros
Donde llora una única estrella,
Se confunde el silencio
Se asemeja al deseo
Y despacito va desandando 
Un cuerpo lleno de fuego.
Desgajándose en los rincones
Sensaciones perdidas en el tiempo
Dolor de roces inconclusos
Dolor de beso sin beso.
Rueda una lágrima en el último intento
Despojada de gemidos 
Que vuelan silenciosos al viento.
Soledad de roce, soledad de manos
Soledad y silencio.-



Alejandra del Valle Abraham
Argentina

martes, 13 de mayo de 2014

Tuya








Mis labios son suave orquídea,
cascada de sensaciones.
Furioso volcán
en erupción,
lava candente
al rosar tu boca.
Soy presa del deseo
mi hechicero de marzo;
Ángel o demonio.
Dios del Olimpo
sueño y realidad.
¡Ven!
Descansa en mi seno,
silencioso
guardián de mis sueños.
Ansío tus besos…
son el juego perfecto
de seducción, deseo y amor.
Eres sopor de mis ansias
¡Hazme tuya!
Haz volar mi cuerpo
lléname de deseo, de lujuria.
Se carcelero de mi sexo y
de mi amor.



América Guerrero González.
México

LE HABLO A TU SILENCIO.








Quiero hablarle a tu silencio
que el viento lleve el mensaje
de este corazón que tanto añora
los ansiados momentos de tu presencia.

Tu silente corazón que hoy extraño,
la ensalada de vivencias compartidas,
ilusiones de vivir que aun motivan
a este corazón que hoy le lanza
a tu corazón cada palabra
con la flecha cómplice de la esperanza.




S.Velia Flores B.
México





lunes, 12 de mayo de 2014

LA COSTURERA








Hace magia con la tijera 
hace vestidos para las hadas 
bordados de sueños con hilos de plata.

Cose ilusiones para esas niñas. 
que esperan con ansias sus primeras galas.
blancas novias que van a la iglesia 
caminan hacia el altar como verdaderas reinas.

La magia que puso la costurera 
al hacer sus vestidos soñados 
cual artista pinta un bello cuadro en el lienzo.

Sus manos trabajan brocados, tules y sedas 
como si quisiera dejar su alma en ellas
en cada puntada escribe un poema 
y quedan grabados en sus vestidos de fiesta.

Sus ojos se iluminan al ver frente al espejo 
dibujada una silueta con un vestido nuevo,
ella los borda con mostacillas de ilusiones, 
canutillos de sueños y con puntillas de encaje
les pone su sello.

La costurera quiere que un día
cuando su morada sea el cielo 
que las estrellas sean de lentejuelas
y el suelo, un verde prado de terciopelo.


María Ethel Rodríguez

Argentina