martes, 16 de junio de 2020

CADAVER EXQUISITO - RED POETAS DE VERACRUZ


La imagen puede contener: árbol, cielo, océano, planta, exterior, naturaleza y agua

Cadáver exquisito
16 06 2020
Ramón de Jesús Hernández olivares, Rosario Lagunes, 
Maria Guadalupe Martínez Bernal, Bertha Laraf,
María Luz Olivares Aldana, Lucila Reyes González, Octavio Ponzanelli, Isidoro Arturo Gómez Montenegro, Felipe Cancino,
Victor Manuel Mendoza Rivera, José Manuel Ambrocio,
María Guadalupe Martínez Bernal, Isabel Lorenzo Gómez, 
José Luis Yepez Sosa

Bajo las penumbras de la noche, tu voz melosa viene en el viento
Se mece mi figura solitaria, en las ramas de un árbol centenario
No viene sola, la acompañan los recuerdos y abrazos desde el cielo...
añoro el árbol que sembramos, regresa la necesidad de deshojar cada frase.
Me murmuras cristales indefinidos, campanas de deseo ...
Y en sus ramas carentes de follajes se aniquila, esos locos días varios que se columpian y surgen como caballos desbocado, los frenéticos deseos.
Que vienen y se marchan con tu recuerdo, con mi loco anhelo de volver a estar contigo, y tener algo más, que tu voz al viento hablándome al oído.
La hojarasca crepitaba bajo tu espalda al compás de nuestro amor, solo ramas de otoño nos separaban de las estrellas.
La energía de nuestro encuentro opacaba a la luna que, apenada, de cuando en cuando se escondía tras las nubes
Y al tener inmóviles mis brazos fatigados.
Abrazar tu corteza y cintura milenaria.
Escasos ramajes de Mansedumbre, furtivo ulular de aves nocturnas pintan el cielo ...vuelo de estrellas y en la irisada luna repito palabras, por la luz ida,
gira vida, los caballos desbocados del llanto desbordado, soplo profético de vida, estrellas...errantes me sobrevuelan, gotea e tiempo.
Una página más, un nuevo día, instantes, otra estación. Hojarasca a tus pies árbol de la concordia.
El otoño de mi vida
Me muestra las beldades
De amar una mujer
Sin sentimientos banales
Experiencia y regocijo
Siento al anochecer
Te diviso a la distancia
Mágica mujer
Y cuando camino pasa la vida dándome infinitos mundos de colores y sonidos envueltos en mi silencio y me atrapan momentos que me arrancan suspiros de esta mi vida que no se explicar el porqué de su presencia espontánea y efímera tocndomerturiritu ritu
¿Qué mece su cuerpo?
Los recuerdos,
tal vez las caricias idas,
Los besos nonatos,
palabras mudas,
desgarradas por el dolor,
¿Morir?
Si. De amor...
Eternidad y olvido...
Han llegado con el otoño,
las reminiscencias del árbol florido,
en el subconsciente navegante,
la última musa en el vaivén del tiempo
Ilumina el espacio infértil del destino,
con la salvedad
de su alma diáfana,
es la última y no hay otra, solo una, para la heredad del poeta.
Y a pesar de todo
sigo sumergida en tu océano
noche eterna
bálsamo divino
donde habita mi corazón
Árbol de vida
quizá nos desprendieron las hojas
pero aquí estamos plantando cara al viento
hasta el final del tiempo.